Anissa nació en Kondisa, cerca de Ceuta, donde creció entre los fogones de su madre Fátima hasta que se fue con nueve años a Ceuta. Creciendo entre dos culturas, con un don natural para la cocina y un espíritu inquisidor para aprender platos nuevos, la cocina de Anissa combina platos marroquís y españoles. Como especialidades recomendamos la pastela, el tajín de cordero o el conejo a la mostaza.